Debido a la pandemia por Covid-19, las mujeres fueron más propensas a sufrir las consecuencias secundarias de ello, ya que, en base a los datos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Nuevo León, las denuncias por Violencia Familiar incrementaron durante este período de confinamiento.
Por ello, el Gobierno del Estado y el Instituto Estatal de las Mujeres realizaron un manual para la actuación y protección del género femenino que fueron o son víctimas de Violencia Familiar o género.
Este documento consiste en identificar si es víctima o posible víctima de violencia, esto acorde a la legislación vigente del estado, la cual incluye los insultos, humillaciones, agresiones verbales, celos, manipulación, chantajes y amenazas, lo que es violencia psicológica.
En el caso de la violencia sexual, consistirá en tocamientos sin consentimiento de la víctima, actos de abuso u hostigamiento sexual, relaciones sexuales forzadas y violación.
De igual forma se incluye el despojo del dinero o limitación de recursos económicos para las necesidades básicas.
Y por último, la violencia patrimonial, que es aquella que consiste en la destrucción de documentos personales, trámites sin su consentimiento para cambio de propietario de bienes muebles e inmuebles.