Debido a que Elon Musk tenía establecido un número de usuarios específico, ahora se ha arrepentido de comprar Twitter hasta que se demuestre que la cantidad de usuarios que existen son reales y no bots como se suele utilizar en muchas plataformas.
La polémica que ha causado cambios en la Bolsa de Valores, no cesará hasta que los socios de Twitter muestren estadísticas y que sean contundentes diciendo que son menos del 5 por ciento los bots que hay en la red social.
Ahora solo quedará mantenernos pendientes a si se logra finiquitar la compra del hombre más rico del mundo, o simplemente se cancela la venta del gigante azul.