Debido a que fue acusado ante el Instituto Nacional Electoral por incurrir en supuesto desvío de recursos del gobierno para el “acarreo” de la contra marcha, López Obrador se mostró molesto.
Aseguró que no han podido “levantar el vuelo” los opositores y les aconsejó que tengan convicciones y en base a eso defiendan causas justas.
En la denuncia, la oposición acusa que hubo coacción amenazando con la pérdida de un cargo público o de algún programa social y por eso es que hubo tantos presentes en esta contra marcha.