La saturación extrema en las principales vialidades de Monterrey es consecuencia del incremento desproporcionado del parque vehicular, que supera significativamente el crecimiento poblacional.

 

De acuerdo con cifras oficiales, mientras la población en el Área Metropolitana de Monterrey aumentó un 10% de 2015 a 2024, pasando de 5 millones 341,171 a 5 millones 900,000 personas, el número de vehículos creció un 30% en el mismo periodo, alcanzando los 2 millones 340,751.

 

Este crecimiento ha llevado a que en Monterrey exista un auto por cada dos habitantes, una cifra alarmante si se compara con la media global de un vehículo por cada siete personas, exagerando los problemas de tránsito en la ciudad.