El Día Internacional de la Paz, celebrado cada 21 de septiembre, fue establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1981, con el objetivo de promover la paz entre naciones, comunidades y personas.

 

Originalmente, la fecha coincidía con la apertura de la Asamblea General de la ONU, pero en 2001 se fijó el 21 de septiembre como el día oficial dedicado a la no violencia y el alto al fuego en conflictos armados.

 

Este día invita a reflexionar sobre la paz como un proceso continuo que requiere esfuerzo y compromiso diario.

 

Cada año, el Día Internacional de la Paz se enfoca en un tema específico, como el cambio climático o los derechos humanos, para motivar acciones a nivel global.

 

A través de eventos educativos, marchas y ceremonias, se recuerda que la paz no es solo responsabilidad de los líderes mundiales, sino también de cada individuo.

 

Pequeñas acciones cotidianas, como el respeto mutuo y la resolución pacífica de conflictos, contribuyen a construir un entorno más armonioso y estable para todos.