Expertos indican que el agua acumulada por la tormenta Alberto podría abastecer a Monterrey durante una década si se gestionan adecuadamente los más de 200 pozos someros y se completa la Estación de Tratamiento Avanzado “Dulces Nombres”.

 

El hidrólogo Alfredo González señala que esta administración permitiría reducir la extracción de agua de las presas, favoreciendo su mantenimiento.

 

González estima que con los 2,400 litros por segundo adicionales de la nueva estación, el suministro hídrico sería suficiente para satisfacer la demanda de la ciudad, siempre y cuando se optimicen los recursos y se reparen las infraestructuras existentes.