Los resultados preliminares para definir las candidaturas ya se están levantando en todas las entidades, y en las trincheras de los partidos políticos la tensión cada vez está más impregnada, sobre todo en la alianza ‘’Juntos haremos historia’’, conformada por Morena, PT, Verde y Nueva Alianza, pero de ahí sobresalen dos, los morenistas y los petistas que, desde hace ya un rato, vienen manteniendo una serie de conflictos.
Todo indica que este conflicto deviene entre López Obrador y Alberto Anaya, el primero que no quiere ceder ninguna candidatura a la Gubernatura, y el segundo porque no se quiere sentir sometido, algo que provoca el enojo entre ambos y, por ende, querer salirse de la alianza; ¿Quién paga los platos rotos? Mario Delgado, dirigente de Morena, ya que intenta cabalgar en medio de una relación explosiva.
Ante este conflicto, Anaya ahora amaga con disolver todas las alianzas en las entidades donde Morena no tiene garantizado al 100% su triunfo. Como, por ejemplo, en Colima ya avisó que no habrá coalición y Campeche podría tomar el mismo camino.
El historial entre estos dos para nada es color de rosas, si bien mantienen ideologías similares, chocan uno con otro muy recurrentemente, ¿qué pasará de ahora en adelante? Nos queda claro que el PT tiene la valentía de revelarse contra Morena cuando así lo crea conveniente, pues anteriormente los petistas votaron en contra de la eliminación de los fideicomisos en San Lázaro, una iniciativa propuesta por el presidente y por Morena.