Ante la ya casi inminente victoria del candidato demócrata, Joe Biden, quien prácticamente tiene en la bolsa los 270 votos electorales necesarios para llegar a la Casa Blanca, Donald J. Trump impugnó legalmente las votaciones en cuatro estados clave: Wisconsin, Michigan, Georgia y Pensilvania.
Así como su homólogo de México Andrés Manuel López Obrador, Trump exigió en Wisconsin un recuento de voto por voto, mientras que en el resto de los Estados impugnados pidió frenar el conteo alegando irregularidades.
El demócrata obtuvo 26 #votos electorales en Wisconsin y Michigan, Estados originalmente demócratas, pero que fueron ganados por #Trump en el 2016 y ahora han sido reconquistados.
“Creemos que seremos los ganadores, nadie nos va a quitar nuestra democracia, ni ahora ni nunca”, dijo Biden ayer desde el Chase Center de Wilmington, #Delaware.
Por su parte, el republicano señaló acusaciones de fraude, luego de que la ventaja que tenía por la madrugada en algunas de las entidades clave se revirtiera de un segundo para otro.
“Anoche estaba liderando, sólidamente, en muchos Estados clave, casi todos ellos dirigidos y controlados por #demócratas, después, una a una, mis ventajas comenzaron a desaparecer mágicamente cuando se empezaron a contar boletas sorpresa basura’’, escribió en su cuenta de Twitter.
“¿Cómo es posible que cada que cuentan boletas enviadas por correo sean tan devastadores en su porcentaje de poder de #destrucción?”, agregó.
