Desde ayer, la bandera monumental del Mirador del Obispado, en Monterrey, ondea a media asta.

 

El 12 de septiembre, el Gobierno estatal la izó en honor al Batallón de San Patricio, conformado en su mayoría por irlandeses que desertaron del ejército estadounidense durante la guerra entre México y Estados Unidos en 1847.

 

Hoy, la bandera continúa a media asta en memoria de los Niños Héroes, cadetes mexicanos que murieron heroicamente en la Batalla de Chapultepec el 13 de septiembre de ese mismo año.

 

La bandera monumental, ubicada en lo alto del Cerro del Obispado, fue inaugurada en 2005 y cuenta con un asta de 100 metros de altura y una bandera que mide 50 por 30 metros, pesando 250 kilogramos.

 

Este emblemático símbolo es un importante atractivo tanto para locales como para turistas, especialmente durante fechas conmemorativas como estas.