Los gigantes tecnológicos, que propusieron el proyecto Pacific Light Cable Network (PLCN) en 2017 para tres destinos transpacíficos, decidieron retirar su solicitud de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) después de que la Administración de Trump afirmara que Pelín podría usar el enlace para recopilar información sobre los estadounidenses.
Los servicios de inteligencia y el departamento de justicia de los Estados Unidos pidieron a la FCC rechazar la solicitud, argumentando que el canal de comunicación con Hong Kong le daría a China la oportunidad de obtener información personal de los ciudadanos americanos.
Por su parte, un portavoz de Alphabet (empresa de matriz de Google) comentó que la compañía sigue trabajando “a través de canales aprobados para obtener licencias para nuestros cables submarinos”. Asimismo, agregó que “se ha retirado y se ha enviado una solicitud revisada para las partes del sistema de Estados Unidos-Taiwán y Estados Unidos-Filipinas”.