Los fabricantes de armas demandados por el gobierno del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador pidieron “desechar el caso” a la Corte Federal de Massachusetts, donde se presentó la querella en su contra.
“Los acusados de manera respetuosa piden a la Corte desechar a la demanda bajo los procedimientos de las regulaciones federales para lo civil”, se lee en los documentos entregados por miembros de la Asociación del Rifle.
Empresas como Glock, Barrett Firearms, Sturm Ruger & CO y Colt pidieron al juez Dennis Saylor no hacer caso a la demanda impuesta por el gobierno mexicano, una vez que ellos no son responsables del uso que los carteles de México les den a las armas en territorio nacional, pues estas son producidas legalmente en Estados Unidos.
“El gobierno de México se apoya en una vaga, sin sustento y altamente atenuada cadena de eventos descritos en estos documentos que involucra a múltiples actores sin relación con Ruger (y Witmer) quienes presuntamente han actuado criminalmente para conectar las actividades legales de nosotros en Massachusetts con la violencia criminal en México”, destaca el documento.