En un año con solo 11 días de buena calidad del aire en la zona metropolitana, un nuevo estudio publicado por JAMA Network Open revela que la exposición a partículas finas PM 2.5 durante el embarazo podría aumentar el riesgo de enfermedades mentales en jóvenes, como depresión, ansiedad y episodios psicóticos.

 

Según la investigación, cada aumento de 0.72 microgramos de PM 2.5 eleva un 11% las probabilidades de experiencias psicóticas y un 10% el riesgo de depresión en los hijos entre 13 y 24 años.

 

El pediatra Gordon Bennett señala que la contaminación ambiental, al promover inflamación y estrés en el cerebro, podría estar contribuyendo a estos problemas psiquiátricos, subrayando la necesidad de abordar la calidad del aire como una prioridad de salud pública.