La Ley de Amnistía, propuesta por el propio presidente de México, López Obrador, y aprobada por el Senado en abril del año pasado, la cual tiene como finalidad facilitar la liberación de personas privadas de su libertad, no benefició en 2020 absolutamente a ninguna persona.
El pasado 28 de diciembre, la comisión que debe aprobar la concesión de estos beneficios sesionó apenas por segunda ocasión en seis meses con la finalizada d de analizar los primeros 181 casos. Sin embargo, ninguno de ellos fue aprobado todavía, según fuentes federales.
Y no solo no se han aprobado, sino que en la sesión se reveló que existen fallas y omisiones en el 70% de las solicitudes presentadas que impiden su validez y trámite.
Para empeorarlo, la situación en las cárceles se agrava aún más, ya que la población penitenciaria del país ha incrementado a niveles récord en 2020, y de acuerdo con estimaciones de las autoridades el 2020 cerrará con casi 15 mil reos más de los que había en diciembre de 2019.
En base a la información oficial presentada por la Secretaría de Gobernación (Segob) y que fue puesta sobre la mesa en la sesión del comité, de momento han recibido formalmente 1 mil 62 solicitudes de amnistía de parte de las personas recluidas en distintos penales del país, no obstante, la mayoría de estas han quedado en el archivo muerto.