Una mayoría de legisladores de Morena, junto con un grupo del PT, se vieron sorprendidos por el llamado del Presidente Andrés Manuel López Obrador por permitir que el PRI tuviera la presidencia de la Cámara de Diputados.
“Hay que respetar la legalidad y no hacer lo mismo de antes, nada de maniobras por cargos se tiene que respetar la ley, el reglamento”, dijo López Obrador en su mañanera al argumentar que legalmente correspondía al tricolor encabezar San Lázaro.
No obstante, al momento de votarse ayer en el Pleno de la Cámara de Diputados, un grupo que encabezaba la priista Dulce María Sauri, 72 morenistas se opusieron y 63 se abstuvieron, incluido el coordinador parlamentario Mario Delgado.
Con esos 135 votos más 40 en contra del PT, la planilla de Sauri no obtuvo la mayoría requerida para ser electa. Además, 23 morenistas no se presentaron a votar.
Con un total 454 Diputados presentes se requerían al menos 303 votos lograr esa mayoría, pero sólo lograron 278 con votos del PRI, PAN, PVEM, PES y apenas 93 de morenistas.
Por su parte, Gerardo Fernández Noroña, del PT y que pretende ser electo como líder de los Diputados, dijo en una intervención previa a la votación que él era “el presidente de la Cámara en el corazón del pueblo de México y con eso me basta, estoy en su presencia, en sus pensamientos y en sus oraciones”, aseguró el petista.
Noroña impulsó en los últimos días los polémicos “fichajes” de Mauricio Toledo y Héctor Serrano para las filas del PT, a fin de converger la tercera fuerza parlamentaria, dejar afuera al PRI y con ello, arrebatarle la presidencia de la Cámara baja.
Será el sábado 5 de septiembre cuando se repita votación de la Mesa Directiva, fecha límite en la normativa para lograr un acuerdo.