Como un modo de protesta, un grupo de pianistas encabezados por Francisco Javier Cavazos Almaguer, renunciaron al partido gracias al cacicazgo que se vive dentro del comité municipal a manos de Eduardo García Carrillo, candidato a la alcaldía en pasadas elecciones.
Javier Cavazos presentó su renuncia oficial con el fin de postularse de manera oficial para ejercer como presidente del comité municipal blanquiazul, pues tras haber perdido las elecciones García Carrillo, Cavazos quedó a cargo de la presidencia provisional y este actual movimiento es con el propósito de formalizar.
A pesar de su arduo esfuerzo para lograr la presidencia formal, muchos se han interpuesto en su camino, intentando bloquear su participación en estas próximas elecciones; una de las medidas que tomaron fue informarle que su acta donde se intima su acuerdo de renuncia no es válido pues al estar sólo presentes tres consejeros cuando cuando debería haber mínimo seis, es catalogado como “falta de quórum”.
“Todo es un truco, una trampa, una simulación para imponer en la presidencia a la regidora Ericka Espronceda, que formaba además parte de su planilla, y de esta manera asegurar ser de nuevo el candidato del PAN a la alcaldía en la próxima elección.
Todo tiene un límite y Lalo García no ha entendido que el partido no es de su propiedad. Si en la dirigencia estatal y nacional le permiten pisotear a la militancia allá ellos, pero nosotros ya nos cansamos de sus trampas y manipulaciones, por ello preferimos renunciar”, informó Cavazos Almaguer en modo de queja.
“El PAN en Santiago tiene dueño y se llama Lalo García” concluyó molesto el funcionario.
Además, comentó que son siete familias completas que abandonarían al partido, y aseguró también que tras su renuncia, no serían los únicos que dejarían al blanquiazul.