El gobernador Samuel García se aventó una de esas que menciona el señor presidente en la mañanera, “la culpa es de los gobiernos anteriores”. Así, se salió por la tangente.
Ante cuestionarle por la falta de estrategia real para buscar una solución al problema de sequía extrema que tenemos en el Estado, el gobernatore se salió por la fácil y culpó a Jaime, el Bronco Rodríguez.
Llamándolo corrupto y que por él Nuevo León no tiene agua es una de las aberraciones mediáticas más viscerales que se le ha visto al gobernador. Parece que ya se siente desesperado. Le llueve sobre mojado.
Este gobierno de simulación ha dejado en claro que no tiene idea de cómo solucionar los problemas de la sociedad. La política del entretenimiento ya no está funcionando.