Los Tigres lograron salir con el triunfo con un marcador de 2-1 frente a la franja del Puebla en el #EstadioUniversitario y dormirán como líderes del Torneo Guardianes 2020.
Sin embargo, con más apuros de los que sugiere un partido que iban ganando 2-0 desde el minuto 7, los dirigidos por el ‘Tuca’, volvieron a la victoria después de dos empates seguidos y llegaron a 8 puntos para escalar a lo más alto de la tabla general y dormir como líder invicto.
Los universitarios rebasaron en la tabla general al #Puebla, #León, Pumas MX, Cruz Azul Fútbol Club y Club América, todos con 7 puntos, aunque éstos últimos tres todavía les falta jugar sus respectivos partidos de la Jornada 4.
El cuadro auriazul mantuvo el invicto y el resultado confirma que es uno de los equipos a vencer en la Liga MX, sin embargo, su funcionamiento sigue siendo deficiente y no da suficientes garantías todavía, sobre todo en las partes complementarias de los partidos.
Los felinos tomaron la ventaja desde muy temprano, gracias a un penalti que el VAR les concedió, luego de que el defensa poblano, Daniel Álvarez ejerciera un pisotón sobre Javier Aquino que André-Pierre Gignac aprovechó y lo convirtió para el 1-0 a los 5 minutos.
Con el ánimo a tope que te da un gol ‘’de vestidor’’, los Tigres pegaron de nuevo a los 7′ con un gol de Eduardo Vargas a pase de Luis Quiñones desde la banda derecha.
A partir de ese momento, los #Tigres se echaron a la hamaca y el peso del partido lo llevó el cuadro visitante que empezó a mostrar las condiciones que lo trajeron al Uni como uno de los líderes del certamen.
Por lapsos, el Puebla logró quitarle el control del balón a los felinos que mostraron su deslucido nivel y fastidió al propio “Tuca”.
La preocupación del brasileño no era en vano y quedó demostrado al minuto 58′, cuando La Franja descontó con un gol por parte de su goleador, Santiago Ormeño en un tiro de esquina.
Ya con ventaja expuesta, Ferretti decidió meter al lateral izquierdo Jorge Torres Nilo y Jesús Dueñas pasó al medio campo para tratar de recuperar el balón, pero la posterior expulsión de Carlos Salcedo cambió los planes. Ese salcedo no da ninguna, NINGUNA.
Los últimos 20 minutos, Tigres los pasó defendiendo en su propio campo (como siempre) y el portero #Guzmán fue exigido en un cierre de partido lleno de nervio.
La victoria los deja en lo más arriba de la tabla, pero para nada deja pasar por alto las dudas sobre un equipo que poco a poco ha perdido su sello de un buen juego.