La Secretaría de Cultura (SC) y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), mediante un comunicado rechazaron los actos de violencia e intolerancia que protagonizaron hoy integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores (UNTA) en el interior del Palacio de Bellas Artes por la pintura del artista Fabián Cháirez que se incluye en la exposición Emiliano. Zapata después de Zapata.
Las instituciones condenaron cualquier acto de violencia que vulnere los derechos humanos, las libertades de expresión y la creación, porque ellas “constituyen la forma más profunda de nuestra democracia”.
En el documento comentaron: “la violencia e intolerancia nunca tendrán cabida dentro de las instituciones que defienden las libertades ganadas por toda la sociedad mexicana.
Rechazamos cualquier tipo de violencia que afecte los derechos humanos. No compartimos la censura como mecanismo de regulación de una sociedad que reclama libertad de expresión y madurez en el diálogo”.
Explicaron también que uno de los propósitos del arte es invitar a la reflexión sobre las problemáticas, los anhelos y las divergencias que habitan en una sociedad que lucha por ser mejor, en cuestiones de diversidad, en el respeto a los derechos humanos y la libertad creativa, en los derechos de las personas que asumen en su diversidad una parte de su identidad.
“Lamentamos las agresiones que sufrieron dos jóvenes en manos de personas que expresaron insultos basados en la homofobia y la intolerancia. El INBAL le procuró la atención médica necesaria y el acompañamiento legal correspondiente.
Rechazamos también las agresiones que sufrieron también representantes de los medios de comunicación.”
Las dependencias aclararon que la muestra no es solo en torno a una sola pieza, ni a un solo enfoque, ya que “reúne por primera vez la producción de cien años de imágenes zapatistas”, además de incluir objetos históricos de Zapata, como el sombrero que portaba el día de su muerte o la famosa fotografía con traje de charro de 1911.