POR: DON MAQUI
A veces, la política se parece a una obra de teatro de dos actos montados en escenarios distintos, pero con el mismo libreto detrás del telón, San Nicolás de los Garza, bastión por excelencia del panismo norteño, vivió en las últimas horas un par de escenas que, aunque contrastantes en forma, comparten el fondo, la lucha encarnizada por el último reducto azul en el Estado.
En la primera escena, luminosa y vestida de glamour, el Gobierno del Estado echó a andar su nuevo programa social llamado “Taco’n Ganas”, el evento, que pareció más mitin que lanzamiento institucional, fue encabezado por Ale Morales y Roberta Carrillo, dos ex candidatas de Movimiento Ciudadano, a la Alcaldía y Diputación local, respectivamente, que, aunque no ganaron en las urnas, encontraron nueva vida política bajo el cobijo de la estructura naranja, el espaldarazo no fue menor, la plana mayor del samuelismo se dio cita para dejar claro que van por todo… y por todos.
En el otro acto, más modesto y sin reflectores, el panismo local intentó enviar señales de unidad, Chale de la Fuente, quien anda en franca búsqueda de no caerse del mapa político ya sea como Diputado o como Alcalde—, apareció acompañado de Lily Olivares, la mujer que muchos ven como la sucesora natural de Daniel Carrillo en San Nico, el mensaje era claro, no estamos divididos o al menos, no queremos que lo parezca.
Y es que la preocupación es real, en Acción Nacional ya no hay margen para ensayos ni divisiones, si quieren conservar su último bastión, tienen que cerrar filas… y cerrarlas ya, porque mientras los azules aún discuten quién va y quién se baja, los naranjas ya están operando, caminando y, sobre todo, lanzando programas con sabor a campaña.
La guerra por San Nicolás ha comenzado y más que un duelo de partidos, esto se perfila como un enfrentamiento entre dos figuras, Samuel García, con todo el poder y los recursos del gobierno estatal y Chefo Salgado, líder panista que sabe que si cae San Nico, cae también su hegemonía.
Así que, agárrese, porque lo que viene no es una elección, es una batalla por el alma de Nuevo León y San Nicolás es el campo de guerra.