La Secretaría de Medio Ambiente de Nuevo León, encabezada por Alfonso Martínez, emitió una alerta debido a altos niveles de dióxido de azufre detectados en la zona metropolitana de Monterrey, provenientes de la Refinería de Cadereyta.
De acuerdo con el funcionario, las concentraciones de este contaminante superaron el límite normativo de 75 partes por millón (ppm), alcanzando un pico de 158.8 ppm durante la madrugada. Aunque en la mañana los niveles descendieron a 102.2 ppm y continuaron bajando con el transcurso del día, el impacto en la calidad del aire fue crítico.
El Sistema Integral de Monitoreo Ambiental reportó calidad del aire mala a muy mala en diversos municipios, entre ellos Santa Catarina, García, San Pedro, Monterrey, San Nicolás y Guadalupe.
Además, en los últimos días, vecinos de la zona han reportado olores intensos a azufre, lo que refuerza la preocupación por las emisiones de la refinería y sus efectos en la salud pública.
Ante esta situación, el Gobierno del Estado mantiene el monitoreo constante y ha solicitado medidas urgentes para reducir la contaminación y evitar futuros episodios de alta toxicidad en el aire.