Fue la Diputada Marcela Guerra quien recientemente solicitó a la Cámara de Diputados y a los Gobernadores de Nuevo León y Tamaulipas, revisar juntos el acuerdo de Trasvase de Aguas de 1996, ya que, evidentemente las condiciones naturales, económicas y sociales, no son las mismas que en la época cuando fue firmado.
En su intervención en la tribuna fue cuando propuso revisar y modificar dicho acuerdo, puesto que las condiciones actuales son totalmente diferentes, también señaló que el decreto de la crisis hídrica debe respetarse.
En el marco de la crisis hídrica que aún vive el estado de Nuevo León, la priista subrayó que el agua potable
es un derecho humano de interés superior, por encima de cualquier otro uso del líquido, y que la gente de Nuevo León, necesita de dicho recurso de forma “asequible, potable y constante”.
