Algo que nos ha quedado claro como sociedad es que no todo es lo que parece, hemos visto innumerables veces como individuos que dicen portar su cargo en favor de la ciudadanía, terminan por darle la espalda a la misma por su poca empatía y falta de valores éticos. Tal es el caso de Grecia Benavides, funcionaria de los programas de Desarrollo del Gobierno en Nuevo León, partidista de la 4T y quien se describe como activista y defensora por los derechos de la ciudadanía en el Estado, pero, que no lo engañe, pues la funcionaria ha quedado a deber con su trabajo, en especial con el programa de ‘68 y más’.
La historia de Francisco Martínez Sánchez, una persona mayor de escasos recursos, que cuenta con la edad de 75 años, residente del Municipio de San Nicolás de los Garza y quien fuera uno de los beneficiados del programa ’68 y más’, sin embargo, este apoyo que se le entregaba por bimestre, dejó de llegarle desde el mes de febrero del presente año, provocando una situación preocupante para su bienestar, ya que no tiene ingreso alguno para sostener sus necesidades básicas, además el tema de la pandemia, es un factor muy desfavorable para su situación.
El caso es que, Don Francisco pidió la ayuda de la Subdelegada, Grecia Benavides, quien es la encargada de este programa en la zona donde él radica, para que se le orientara cómo reestablecer el apoyo del programa, que cabe mencionar era su único ingreso para sobrevivir, dándole por razón que su apoyo fue detenido porque había un problema con su CURP, el cual estaba incorrecto.
Por lo anterior, Don Francisco pese a su edad y con el problema de la pandemia, acudió a las instalaciones del Pabellón Ciudadano, a que le dieran una copia de su CURP original y una vez obteniéndolo, lo mandó por medio del contacto que le proporcionaron para subsanar el problema, sin embargo, dicho esfuerzo fue en vano, pues argumentaron que el CURP era el mismo y que seguía incorrecto, dejándolo sin opciones y, por ende, en la misma situación de vulnerabilidad, sin ningún tipo de ayuda por parte de la administración de la 4T y la Subdelegada, Grecia Benavides, quien dice ser defensora de los derechos de la ciudadanía.
Hasta la fecha, Don Francisco no tiene como sostenerse económicamente, lo han dejado sólo, sin apoyo y totalmente preocupado por su situación, sabiendo que es una persona de la tercera edad y dándole la espalda a la ideología que según representa la 4T y la funcionaria que, supuestamente dice ser de convicciones firmes, pero demuestra todo lo contrario.