POR: DON MAQUI
Causa mucha curiosidad leer en redes sociales, y sobretodo escuchar a Samuel García , que desde el arranque de su campaña habla de una vieja política, dirigiéndose con insultos a Clara Luz Flores Carrales, a su esposo Abel Guerra, Adrián de la Garza y a Paco Cienfuegos.
La campaña del de Movimiento Ciudadano se ha basado en ataques sistemáticos a estos personajes en el 70% de sus apariciones, incluso, sus panorámicos muestran gráficamente lo que pretende imponer en la mente del colectivo, él es la nueva política y los antes mencionados la vieja.
Pero lo que llama la atención es que evita a toda costa y salvo honrosas excepciones demeritar al Partido Acción Nacional y a su candidato, que en estricto sentido personal, tiene más cola que le pisen que Adrián de la Garza y Clara Luz Flores, hablamos de Fernando Larrazabal, protagonista del escandaloso “Quesogate”.
Pero tal parece que Samuel García, fiel a su estilo, es incongruente con lo que hace y con lo que dice, a Larrazábal no lo toca ni con el pétalo de una rosa porque pareciera sigue esperando que el último lugar en las encuestas se le sume, como todo apunta, lo hará en días próximos, anhela la declinación del Partido Acción Nacional a su favor para así consolidar lo que le llama una victoria irreversible.
Por eso muestra tanto afecto al oaxaqueño, parece que dos personajes que de la noche a la mañana crearon emporios económicos pueden tenerse afecto y llevarse muy bien, bueno eso es lo que parece.