De acuerdo a lo que se ha señalado recientemente, si no se lleva a cabo la actualización de las placas, el propietario tendrá problemas con su aseguradora al momento de un accidente porque la compañía sí pagaría los daños a terceros, pero no los del asegurado a menos que este entable una demanda lo cual sería largo y costoso.
Ya que, se menciona que este punto se establece en los lineamientos de seguros, es que no tener actualizadas obligaciones vehiculares como las placas, exime a las aseguradoras de cubrir costos de multas o estadías en corralones en caso de que la póliza lo contemple.
En materia de seguridad, una persona que se deshizo del vehículo y no pidió al nuevo propietario que actualizara datos, es susceptible a que se le involucre en delitos, pues la unidad puede utilizarse en la comisión de estos y culpar al anterior dueño.
Ante esto, el director del Instituto de Control Vehicular, Rubén Zaragoza Buelna, dijo que es necesario que los casi 1.3 millones de placas que vencen el 1 de diciembre, vayan a realizar su trámite de actualización.
“Si nosotros no damos una información actualizada es porque no la tenemos, ahí las investigaciones se hacen un poco más lentas, por eso es el llamado a actualizar lo que tiene que ver con sus registros vehiculares”, señaló
