Que si de algo viven los políticos fantoches e hipócritas es de las incongruencias, y el claro ejemplo de alguien que no tiene ética, no tiene palabra y le hace falta mucho honor a sus ideales, es Daniel Torres, el hoy precandidato de Morena por la alcaldía de Guadalupe, pero que antes aborrecía ese partido, e incluso, le faltó el respeto a la máxima figura del morenismo, Andrés Manuel López Obrador.

Que extraño a veces son las circunstancias en las que se presentan estos escenarios políticos, sin duda, las coyunturas a veces suelen jugar a favor o en contra, en este caso, al de Guadalupe le ha jugado en contra, Daniel Torres si tiene un antecedente con Andrés Manuel, y no, no es una foto, sino un video donde lo llama populista y “confiado”.

A Torres le ha caído como balde de tierra su propio dicho, pues anteriormente señalaba que Morena se dedicaba a recoger candidatos y políticos corruptos.

Que coincidencia que hoy se arrastra a los pies de la expriista y ahora morenista Clara Luz Flores para que le den la bendición por Guadalupe, sin embargo, nunca creyó que hoy la vida le traería una cucharada de su propia medicina, y que ahora se tiene que quedar sentado y callado esperando recibir la llamada de quien controla la campaña de la de Escobedo, todo por cumplir su ambición de llegar al poder simplemente para beneficiarse de él, no para beneficiar a la ciudadanía, que eso quede claro, porque este señor no tiene principios, y no tiene honor alguno en su palabra, él mismo lo dijo, nosotros no.

De ser el abanderado de Morena, hay que tener cuidado, y no por que vaya a ganar, sino porque se le conoce por ser un traidor, así le jugó y le pagó de mal a Jaime Rodríguez Calderón, quien era su padrino político, y hoy no hace más que picarle los ojos como un cuervo.

El exindependiente tiene razón, Morena se dedica a recoger políticos corruptos y acobijar a quienes cumplen con ese perfil, ojalá que los comentarios que dijo antes no trasciendan en su hoy pretensión de ser el alcalde, porque sin duda, lo que se dice, no se olvida tan fácil.

Que el mesías de Tabasco se apiade del alma de este pobre personaje que no tiene rumbo y que sólo busca una posición importante para dejar atrás todas sus malas vivencias y experiencias que él mismo se ha provocado.