Vaya que la política deja buenos dividendos y convierte a los políticos en empresarios de la noche a la mañana.

Tal es el caso del Doctor Santiago Preciado que de ser el médico del pueblo pasó a ser el “cáncer” del mismo con su patética y corrupta administración para regresar triunfalmente cómo empresario al fundar su nueva mina de oro.

Claro, se sabe y se dice despacio y quedito que la mafia estaba encabezada por Arnoldo Ledezma y solapada por Eduardo Leal Buenfil, ambos afines a Raúl Gracia, el segundo de los más “queridos” por Mauris.

Se rumora con mucha insistencia que Mauris recibía su jugoso moche por mes y lo recibía Lalo Leal por medio de su padre conocidos en el pueblo escobero como Los Mubarqui.

Pues vaya que les resultó el negocio a todos porque hoy se sabe qué Preciado Robles encabeza Constructora y Maquinaria Nacional Robles, que se verá favorecida por la intervención de Mauris en los terruños albiazules.

Ya olvidó el Doctorcito que le pidieron cinco millones de pesos para ser candidato en 2018 y no aceptó por ello lo evidente de su no reelección.

No, si el dinero desata cualquier problema que exista.

Veremos cómo justifica el Médico su bonanza empresarial, porque de Arnoldo Ledezma y su hotel en Doctor Arroyo mejor les escribimos otra ocasión.
Como diría la viejita, porque esa, “esa es otra historia”.