Sin reuniones previas, el día de ayer el Gobierno del Estado envió al Congreso, a medias, el Paquete Fiscal 2023 con la Ley de Ingresos, la Ley de Hacienda y la Ley que crea el Instituto de Control Vehicular, las cuales tienen por objetivo cobrar más en Uber, emisión de constancia educativas, alcoholes, casinos y un permiso especial para los autos con placas foraneas.

En los documentos firmados el 4 de noviembre por el Gobernador Samuel García, y que fueron presentados ayer a las 13:12 horas al Congreso local, se informó que el tesorero, Carlos Garza Ibarra, no envió la Ley de Egresos, con el fin de que, según fuentes, los diputados avalen lo que ya se envió y una vez asegurado, el gobernador se apersone con la citada ley para el 2023.

En dicha ley se precisa que el impuesto que pagan las empresas de redes de transporte como Uber, Didi, Cabify, pasará del 1.5 a 3.0 por ciento, lo cual a su vez prevén se refleje en el impuesto a las tarifas efectivamente cobradas por las empresas de redes de transporte para recibir, 213 millones 604 mil pesos, el equivalente a 164.5 por ciento más comparado con el presupuesto del 2022.

“En específico se contempla para los niveles Medio Superior y Superior validar el certificado de estudios, toda vez que este servicio requiere un esfuerzo interinstitucional para su realización ya que permite la detección de documentos apócrifos, asimismo en diversos estados de la República Mexicana ya cuentan con dicho trámite y servicio de validación”, se lee en la exposición de motivos.

En consideración a que Nuevo León ocupa el primer lugar en gasto absoluto y per cápita en bebidas alcohólicas, mientras que en promedio la entidad recauda menos de 40 por ciento del resto de las principales entidades en este rubro, en materia de derechos por licencias y/o refrendos de alcoholes, se propone un ajuste a las cuotas orientado a fortalecer su administración y control, que se traduzca en una mayor eficiencia en la prestación del servicio.