La policía de Brasil, debió de actuar de inmediato por órdenes de Lula, nuevo mandatario del país antes mencionado, al enterarse de que partidarios de Bolsonaro arrinconaron al Congreso.
Se niegan a aceptar la victoria de Lula en los pasados comicios y han reclamado que fue un hecho sin precedentes y fraudulento.
Este hecho ha sido recordado como lo fue el asalto al Capitolio por los secuaces de Trump quienes no aceptaban la elección de Biden como mandatario americano, y ahora en Brasil en la arquitectura moderna es que se veía a cientos de personas desfilar por el lugar.