Es complicado que todo el mundo esté de acuerdo con un gobernador, sin embargo, con el comienzo prometedor de Samuel García, parecía que tendría por lo menos un primer año con una aprobación altísima misma que se ha visto afectada por todos los problemas en los que se ha metido junto con su esposa.
Los más recientes siendo, el menor con el que lucraron, las clases presenciales, el poco control de covid y una cuenta de gobierno de forma privada.
Tendrá Samuel que tomar su campaña de marketing en redes sociales con pinzas pues poco a poco va desagradando a la gente y causando una total decepción en la población que confió en que la juventud de dos chavos en redes sociales funcionaría en Nuevo León, en un estado que cae a pedazos y que vive su peor momento de la pandemia, y otras ramas en las cuáles no han resuelto nada.
La picada de García se está viendo reflejada muy rápidamente y la nula experiencia al frente de un municipio, por ejemplo, le está pasando factura, abusando de su poder de gobernador, teniendo ya a su esposa de co-gobernadora y por si fuera poco haciendo de las suyas.
Samuel tendrá que tomar decisiones eficaces y es primero que su esposa se decida ¿qué es? Primera dama, titular de una oficina, esposa del gobernador o influencer, porque ser las cuatro a la vez es complicado y ha causado muchísimas polémicas que al día de hoy los tiene en oídos nacionales y no exactamente por buenas acciones, rumbo a la presidencia con mala fama, esto aunque mala publicidad nunca hay y parece que es lo que quieren lograr.