POR: DON MAQUI

Si algo de tensión le faltaba a la alianza que encabeza Clara Luz Flores Carrales y su esposo Abel Guerra, es que una diputada federal de origen morenista publicara en sus redes sociales estar en contra de la imposición que pretenden hacer en Escobedo de un expriista que es amigo del esposo de la candidata de la alianza del presidente.

No es cosa menor echarse encima a una mujer que no se detiene cuando cree que los derechos de la militancia, de la ciudadanía o de las mujeres se ven vulnerados. Para muestra le tenemos un botón,  fue de las promotoras principales que encabezaron la lucha contra Félix Salgado Macedonio, a quién acusan de violación en el estado de Guerrero para derrocarlo de su candidatura al gobierno de aquella entidad.

Logró, junto a otras mujeres, su cometido y hoy Salgado Macedonio tiene la duda fundada de que pueda encabezar la candidatura al gobierno, esto aún y que Andrés Manuel López Obrador no se metió en el proceso.

También es de destacarse que fue la propia legisladora federal quien luchó férreo contra el Auditor Superior de la Federación por lo que consideran un agravio a la cuarta transformación y decidió mandar citarlo a comparecer a través de un exhorto de la Comisión de vigilancia de la cámara de diputados.

Andrés Mijes recibió dos misiles impactantes de parte de Paola González, quien palabras más palabras menos, le cuestionó qué méritos tiene para encabezar la candidatura de Morena y que, aunque los tuviera, no lo quieren.

Parece que poco a poco los fantasmas de las imposiciones que pretende hacer de sus amigos se le rebuscarán a Clara Luz y su esposo Abel Guerra, quienes creados y educados a la vieja escuela del PRI, pretenden quedarse con todas las rebanadas del jugoso  pastel y no están dispuestos a ceder nada en absoluto para los fundadores y las bases de Morena.

¿Qué precio estarán dispuestos a pagar los nuevos dueños de Morena en el Estado?, sólo lo sabremos cuando se cierren las negociaciones y las encuestas marquen la salida. Por ahora, el round contra las imposiciones ha empezado a tambor batiente.