Hoy se conmemora el día internacional de la Mujer, inicialmente la Mujer trabajadora, fue institucionalizada en 1975 por las Naciones Unidas. Esto se logra tras la búsqueda de la equidad de oportunidades en la sociedad, como el derecho al sufragio, oportunidades laborales en condiciones dignas y pagos justos. Siendo el 8 de marzo el día de esta celebración, sin embargo, aún existen innumerables causas por alcanzar. Como mujer, reconozco mi naturaleza diferente al varón, no somos iguales, nos complementamos, pero nunca nos podemos comparar o igualar. Como mujer, creo en la igualdad como un derecho, que tanto mujeres como hombres podemos desempeñar cargos públicos o privados, ser buenos padres o madres, tener oportunidades de desarrollo profesional y laboral. La mujer por naturaleza es más sensible, intuitiva, expresiva, protectora, en su cuerpo se da la vida y desde ese momento aprende a ser compartida, generosa, empática, paciente y tolerante. Claro que también hay muchas mujeres que no necesariamente tienen esas cualidades por ser madres, muchas lo son sin tener hijos, así como también muchas no lo son, aunque tengan hijos. El valor de la mujer va más allá de una apariencia física, es valiosa por su capacidad. Por naturaleza es educadora y generadora de ambientes de unidad y solidaridad en la familia. Deseo que se reconozca más la capacidad, talento, responsabilidad y compromiso de la mujer, que se dignifique la labor de la mujer, que se den más oportunidades en todos los ámbitos por la capacidad en sí. A todas las mujeres hoy y siempre les deseo una vida digna, rodeadas de personas que las amen, respeten y valoren. Las felicito por toda su entrega, esfuerzo, renuncia a su desarrollo profesional o laborar para formar una familia y buscar siempre la unión familiar que será recompensado en esta vida y en la vida eterna. Mujer, ámate, valórate, respétate y cuídate, nadie puede dar a los demás, lo que no hace para sí misma, primero.
“Si tus ojos son positivos, amarás el mundo”.
Pero si tu lenguaje es positivo, el mundo te amará.
El amor de una mujer está en sus acciones, ella mira con su corazón y siente con sus ojos.
Una mujer es el banco donde cada miembro de la familia resuelve las preocupaciones, las heridas y la ira.
Una mujer es el cemento que mantiene unida a la familia y su amor durará toda la vida “.
Teresa de Calcuta