Luego de que Antonio Avilés renunciara al cargo de la paraestatal multinacional Exportadora de Sal (ESSA) el pasado 7 de diciembre, Tatiana Clouthier, Secretaría de Economía, echó mano de su poder e impuso en dicho puesto a su amigo Gregorio Cavazos.
El favor que le hizo al constructor regio recibió muchas críticas por parte de sus propios colegas, que mencionan la falta experiencia es una problemática primordial.
“Sorprende, y no para bien, que, a un pequeño empresario del ramo de la construcción, y sin experiencia en exportaciones y comercio internacional, lo asignen para ese cargo y una empresa de ese tamaño.
“No es un empresario que haya hecho grandes volúmenes de compras de maquinaria en el extranjero, o cosas, así como para que le hayan dado una responsabilidad en la dirección de una paraestatal relacionada con exportaciones, y menos de sal, pues es un producto que nada tiene que ver con nuestra actividad”, comentaron miembros de la constructora que pidieron ser anónimos.
Cavazos sostenía una constructora con ventas de 15 millones de pesos este último año entre servicios de mantenimiento y conservación de edificios, remodelaciones, fachadas y albañilería, pero unos días antes de que Clouthier entrará en su cargo, fue dada de baja ante el SAT.
Así que, le parecieron más tentadores los 2 mil 542 millones de pesos que ESSA obtuvo el 2019 en ventas.
“Tuvo tiempo para hacerlo desde que se supo que Tatiana iba a la Secretaría, es muy amigo de ella”, comentaron.
