El Papa Francisco pasó la noche sin complicaciones y sin episodios febriles, según el más reciente parte médico, las pruebas realizadas confirmaron la infección en las vías respiratorias, lo que llevó a una ligera modificación en su tratamiento con base en nuevos hallazgos microbiológicos, a pesar de ello, algunos valores en sus exámenes de laboratorio han mostrado mejoría, y durante la mañana pudo recibir la Sagrada Eucaristía, combinando su reposo con oración y lectura.
Ante este panorama, el equipo médico ha indicado reposo absoluto para facilitar su recuperación, lo que impedirá que el Sumo Pontífice dirija la oración del Ángelus este domingo 16 de febrero, la decisión busca evitar cualquier esfuerzo que pueda comprometer su salud, mientras el Vaticano monitorea de cerca su evolución.
El Papa ha sido informado de los numerosos mensajes de apoyo que ha recibido y ha expresado su gratitud, además de solicitar a los fieles que continúen rezando por él, la comunidad católica sigue atenta a su estado de salud, en espera de su pronta recuperación.