La policía peruana, por órdenes superiores, detuvo a Pedro Castillo cuando viajaba en una camioneta sin aparente rastro de hacia qué dirección. Pese a que esto se hizo oficial de inmediato en los medios de comunicación, tanto nacionales como internacionales, aún no se sabe la razón de su detención.

El viaje que no pudo terminar era con el ex Primer Ministro, Anibal Torres, quien renunció meses antes sin aparente razón y ahora tras la destitución del Congreso por presunta “incapacidad moral”, parece un tema político y para ajuste de cuentas.