La salida de Víctor Fuentes Solís del Partido Acción Nacional parece casi inminente, luego de ser casi oficial su avasalladora derrota contra Larrazábal, parece que tomó un momento de reflexión y ha dicho que sus propósitos y causas no encajan en un partido como lo es hoy en día el PAN, una organización manchada de nepotismo y corrupción interna.
Sin embargo, Fuentes Solís ha dejado claro que sus ideales son nobles y honestos y, por ende, merece la pena seguir luchando por ellos, aunque no sea donde todo comenzó.
“Desde un principio y en todo momento se visualizaba un panorama completamente adverso, en donde todos los actores y factores no acompañaron una causa como la que nosotros pretendemos encabezar. Pero cuando nuestras causas y propósitos son nobles y honestos hay que defenderlos y buscarlos hasta el final, sin miedo a la adversidad”, dijo el Senador.
El todavía panista, como todo un hombre honorable, agradeció a la institución que le dio la oportunidad de ser lo que hoy es, un político capaz y con un nombre en lo más alto del gremio, lástima que nunca supieron valorarlo por sus principios elitistas que conservan por tradición.
Por último, dejó claro que siempre estará al servicio de Nuevo León y de la ciudadanía, pues esa es su principal convicción y aspiración.
“Jamás he hecho nada en contra de Nuevo León y siempre que pueda hacer algo en su favor, lo haré”, concluyó.
El presagio es más que claro con este mensaje, la victoria de Larrazábal es tan clara como la salida de Víctor Fuentes, el panista que siempre le fue fiel a su institución, pero lamentablemente, se encuentra secuestrada por actores que sólo buscan cumplir sus pretensiones en común.