Un partido que huele a muerto cada día qué pasa, parece que marcha a contra lógica siempre, hemos escrito y de sobra que en ese instituto político el requisito para destacar es no pensar distinto a los pseudo líderes que ostentan la directriz oficial y la más fuerte la no oficial.
Víctor Fuentes es casi cadáver político Gracias a su osadía de pelearse con Chefo Salgado, el desaire en su informe fue evidente, nadie del grupo San Nicolás estuvo con el, vamos, hasta Marko Cortés se inventó un retraso de vuelo para cumplir el capricho de Raúl Gracia y Chefo de no “validar” a Fuentes como aspirante, le andan inventando rival con (aunque escribirlo nos genere un ataque de risa) Hernán Salinas, si, leyó usted bien, Hernán Salinas (que a duras penas articula una oración)
En Guadalupe, Pedro Garza ha sido ungido con un nombramiento más decorativo que un pino navideño para darle “cristiana sepultura” a su sueño de repetir triunfo en Guadalupe, esto porque la familia es primero y pues bueno, ya saben quién será por enésima ocasión el candidato perdedor.
Apodaca es caso sugeneris, no hay nadie, nadie absolutamente allá que tenga tanto camino recorrido como Marlene Benvenutti, ni su carisma, pero aun así le andan inventando a una rival por el placer de cumplir el instinto canibalesco de borrar los talentos que no son sumisos al cien por ciento.
San Pedro es caso especial, no hay margen de error, si quieren ganarle a Miguel Treviño es Mauricio Fernández o quien el designe la fórmula y aunque Usted no lo crea se andan inventando a Luis Susarrey (no se ría) eso quieren en la capital del dinero.
En Monterrey no debería de existir duda, debe repetir el líder en derrotas electorales de Nuevo León, Felipe de Jesús Cantú, para ver si ya se le hace la capital, pero no, eso no pasará, ya le andan inventando de candidato a (ya esto no da risa, da tristeza) a Juan Carlos Ruiz, que a duras penas puede sacar a flote una sesión de congreso.
Pero, en fin, los sepultureros panistas pasen un día magnífico de Muertos, que sus próximas víctimas están enlistadas y a tono para que les claven la daga de la traición de cada tres años.
A darle que es ¡Pan de Muerto!