Aprovecharse del cargo y ejercer recursos de una administración pública siempre es deleznable, pero es más ruin y artero cuando se hace en medio de una crisis médica.
Velar por el interés propio es normal en los políticos, vaya, es una práctica mundial que el mismo Papa Francisco como Máximo Jerarca de la Iglesia Católica exige se deje de llevar a cabo.
Cual buitres de pradera han llegado rumores del siempre atractivo Pueblo Mágico donde varios personajes de la vida pública andan en campaña abierta por la alcaldía de ese municipio, no está mal, pero deja mucho que desear el timing político con que realizan esas actividades.
Recientemente denunciamos que existe una tala ilegal de Pinos en aquel bello municipio y nadie de los ventajosos “pre pre candidatos” levantó la mano para hacer algo.
Hoy en un medio local se corrobora lo que aquí escribimos sobre David de la Peña y el ex candidato a ese municipio Raphael Martínez quien es comandado por Abel Guerra y muy cercano a Tesorero de Cadereyta donde al parecer tiene algunos prósperos negocios.
Ojalá el INE o la Fiscalía de Delitos Electorales frene este proselitismo ilegal de los ansiosos de tener cargo en 2021 y dejen de lucrar con la gente más necesitada.
