Organismos ciudadanos exigieron a la Auditoría Superior del Estado fiscalizar a la Universidad Autónoma de Nuevo León debido a que la institución emitió sanciones “light” luego de revelarse una red familiar en la Dirección de Construcción y Mantenimiento que benefició con concesiones a la empresa “JPG Construcciones” del priísta Juan Paredes Gloria.
“Debería intervenir el Auditor Superior del Estado (en el caso de la UANL), él tiene la facultad de hacerlo”, reclamó Daniel Butruille, de Ciudadanos Contra la Corrupción.
“Cada año (la UANL) se queja de que no les alcanza el dinero. Ya vemos por qué no les alcanza: porque está hecha la institución para favorecer a propios y extraños”, reclamaron algunos medios.
Incluso, señalaron que la justificación de la institución es la autonomía, pero resaltaron que ésta es para la cátedra y la administración, no para cometer actos ilícitos.
“La autonomía… no es para robarse los recursos públicos, ni para hacer de estas instituciones un negocio para propios y extraños”.
Sin embargo, las indagatorias de la UANL sólo determinaron amonestar, apercibir y reubicar a los involucrados.”Vemos que la Universidad es igual de acomodaticia y de corrupta que el resto de las instituciones públicas”, añadió Butruille, de Ciudadanos Contra la Corrupción.