Tal y como el candidato del PRI y PRD a la gubernatura, Adrián de la Garza, lo había afirmado, las tarjetas que se reparten son catalogados por el propio Instituto Nacional Electoral como propaganda.
El día de hoy, el consejero electoral Ciro Murayama declaró que la mera entrega de “plásticos” que no tienen dinero, bienes o servicios detrás, no es ilegal, es considerado propaganda y la propia autoridad jurisdiccional lo permitió.
Ante las solicitudes públicas que ha hecho Andrés Manuel de retirarles la candidatura a quienes entregan estas “tarjetas”, Murayama aprovecho para decir que el INE, una vez que la candidatura ya está debidamente registrada, tiene la obligación de rendir cuentas, pero en ningún momento la ley prevé que una candidatura pueda ser retirada a media contienda por algún acto que haya realizado durante la “campaña electoral”.
Esta clase de denuncias no son nuevas, pues en el 2017 el mismo Tribunal determinó que la entrega de tarjetas en las que se prometen apoyos de programas sociales cuando se llegue al Gobierno, es completamente valido.