POR: DON MAQUI
Bastó que cuatro gobernadores del Partido Acción Nacional se presentaran a la fiesta de Andrés Manuel López Obrador, para poner a Marko Cortés contra las cuerdas, y aceptar pactar con el gobierno federal al que tanto decía detestar.
La más elocuente de los cuatro gobernadores Panistas fue Maru Campos de Chihuahua, palabras más palabras menos respecto a la llamada atención que pretendió hacerles la dirigencia nacional por asistir al amlofest, soltó de su ronco pecho que no permitirá manipulen las decisiones que toma su estado para beneficio de la sociedad, y que eso implicaba tener una relación institucional y de cercanía con Andrés Manuel López Obrador, lo cual mantendría contra viento y marea para que le vaya bien a sus gobernados.
Inmediatamente vino la reacción de parte de la dirigencia nacional del PAN, que lanzaron en voz del propio Marko Cortés un breve mensaje donde argumentan que aceptan sentarse con el gobierno federal a pactar, los mal pensados dicen que la reforma de energía saldrá con los votos de Acción Nacional, y eso le garantizará a sus gobernadores tener recursos, veremos y diremos.