Maki Ortiz ha sido una mujer valiente y sin temor a las consecuencias que podría tener en caso de no vencer a una figura gigante como es Francisco García Cabeza de Vaca con quien no se doblegó pese a los “ganchos” que le propinó, amenazandola con la integridad de su equipo pero que ni con eso pudo y lo expuso en redes sociales.
Ortiz tomó una decisión final y es ir con Américo Villarreal, con el fin de intentar “rescatar” Tamaulipas del infierno en el que vive diariamente, y tras un abrazo genuino y fuerte en un evento para las mujeres en Reynosa demostró la unidad que tienen.
Una mujer valiente y sin límites que ha logrado hasta ahora formarse en una burbuja política que la pone como uno de los personajes más prestigiosos en Tamaulipas.
Este golpe fue dado con autoridad y se puso sobre la mesa de discusión en la que venían repuntando los panistas, pero que con esta contundente señal, parece más que claro que existe una posibilidad mucho mayor que el brazo de Villarreal sea levantado en las próximas elecciones gubernamentales.
Una batalla digna de película será lo que veremos en este final de campaña, donde buscarán por ambas partes, destaparse con todas sus armas disponibles y no mostrar ningún punto débil hasta el cierre de la jornada dominical establecida para que sea votada.