Por: Don Maqui

Que precio tan alto está pagando el Operador político de Clara Luz Flores Carrales y su también esposo Abel Guerra por aquella jugada de egocentrismo y muestra de músculo político tras un arribo de la ahora apestada y hasta investigada penalmente ex dirigente Morenista, Yeidckol Polevnsky.

Fue épica la escena que mandó filtrar el Señor de Flores donde comparte vehículo con la jerarca morenista en esa época, a más de un centenar de políticos en el estado los dejó atónitos, de las filas del propio #PRI resonaron las alarmas, era inminente que Clara Luz se iría del partido y no solo eso, parecía obvio que abanderaría #Morena.

Cuestión de enfoques de la política, pero a muchos les pareció un mal timing de Abel Guerra, pero él y su equipo ensordecidos por esa muestra de amigos poderosos pactó que la dirigente “destapara” a Clara Luz como una mujer que debería encabezar gubernatura, lástima que los morenistas verdaderamente poderosos tenían “otros datos”.

Se vino la renuncia de Clara y de nuevo cimbraba el avispero tricolor, ya no había lugar a suspicacias, Clara tenía la candidatura morenista en sus manos, nadie en su sano juicio abandona sin tener nada amarrado un partido que la hizo tres veces #Alcaldesa e incluso le regaló la dicha de su matrimonio.

El destino les jugó entonces una mala pasada al Clan Flores Guerra o Guerra Flores, como guste llamarlos, el desplome de #Yeidckol detuvo la afiliación de #ClaraLuz a Morena, ahora debieron mostrar cautela, ahora si, debieron de ser pensantes y no arrogantes.

Paradójicamente su ex partido se recompuso en sus filas y ungió a Heriberto Treviño Cantú como su gallo, ya no habría cabida para el grupo #Escobedo ni en aquel municipio.

Pero parece, que hoy el dirigente actual vino a ponerle el clavo al ataúd de #ClaraLuz Flores de Guerra, no ha dicho que ella no será la candidata a gobernadora por Morena, pero si ha dicho cuáles cualidades debe tener la mujer que encabece esa lucha y ahí Clara no encaja en ninguna.

Quizá Abel Guerra olvidó que sus verdugos de toda la vida, el grupo de Natividad primero y después convertidos al Medinismo son y serán siempre su sombra y ellos, solo ellos a través de Alejandro Moreno Cárdenas pactarán seguramente algunos espacios de poder en Nuevo León.

Ahí vendrá el veto a posibilidades de #Clara y entonces estará consumada una historia más de fracasos electorales de un personaje que ha sido capaz de perder dos veces la capital de Nuevo León, Abel Guerra, quedará claro para la alcaldesa que irónicamente su mejor aliado es su peor estratega, su esposo.