Nadie en su sano juicio podría creer que la decisión de encumbrar a Agustín Basave a la Dirigencia de Movimiento Ciudadano es producto de una concesión natural y voluntaria de Samuel García.
El joven político ha demostrado ser más voraz y rapaz que los propios priistas y panistas que tanto crítica, “El Viejo León” del que habla siempre, habita en su corazón y a cada instante lo lleva a cometer estupideces como las del domingo pasado que apostó su fama y la de su prometida Influencer en la Alameda, fracasando en su intento.
Lleva como le denunciamos aquí mismo, más de un año recibiendo prerrogativas por cerca de 30 millones de pesos que nadie sabe y nadie supo a donde fueron a parar, bueno, las mentes maquiavélicas suponen que a los bolsillos del Senador, sin embargo nada comprobado, vamos, como se dice hoy, no tenemos pruebas pero tampoco dudas.
Pues bien, quien puede creer que Samuel se volvió generoso y deseaba compartir el poder de su partido con alguien más, sería muy ingenuo pensarlo así, Samuel es arrogante por naturaleza, para muestra un botón, incursiona en la cátedra de derecho de la Universidad aún y sabiendo que su tiempo está comprometido en distintas trincheras, aprovecha el cargo y trafica con sus influencias para asumirse como maestro a fin de seguir contando clientes para su intento de ser Gobernador, es una lástima que utilice a la Universidad para ello, pero político al fin, se vale de todo y de todos para lograr sus metas.
Pero lo escrito, escrito está, deberá cederle “voluntariamente a fuerza” la estafeta de su negocio a Agustín Basave y por supuesto el más feliz es Donaldo Colosio que por fin podrá colocar en un puesto público a su socio jurídico.
Por ahora la arrogancia de Samuel ha sido diluida y sometida por la necesidad de mantener contentos a los Colosistas.
Suponemos que Samuel calcula que con esas migajas de 3 millones mensuales para la Sociedad Colosio-Basave será suficiente para entregarle sin condiciones el amor político que tanto le han regateado los últimos meses esos dos personajes.
Veremos si el dinero de las prerrogativas es “mágico” y logra cortar la distancia que existía entre Senador y su Coordinador, será evidencia que el negocio Naranja mal repartido es lo que mantenía a Luis y Agustín en indiferencia con el proyecto del Senador.
Así que ya sabe Maquilector, si ve a Colosio y Basave muy sonrientes en las fotos de campaña de Samuel no vaya a ser mal pensado y crea que es por los dineros que empiezan a fluir para esa sociedad, de ninguna manera.