La posibilidad de que el demócrata, Joe Biden, llegue a la Presidencia de Estados Unidos en el 2021 debilitaría al PIB estadounidense, y con ello, también al mexicano, estimaron expertos de la materia.

La razón se deriva de que Biden ha elaborado un plan fiscal que contempla el aumento de impuestos a empresas, inversionistas y otras personas, al tiempo de bajar la deducción de intereses.

Como, por ejemplo, propone aumentar la tasa corporativa del impuesto sobre la renta del 21 por ciento actual a 28 por ciento y que las compañías paguen un impuesto mínimo cuando generen ganancias contables de al menos 100 MDD al año.

En ese sentido, también subiría del 37.0 al 39.6 por ciento el impuesto sobre la renta individual para ingresos iguales o superiores a los 400 mil dólares y establecer un gravamen sobre la nómina del 12.4 por ciento.

Un análisis de Tax Foundation una organización independiente y sin fines de lucro proyectó que con esos ajustes el plan de Biden le restaría a Estados Unidos 1.5 por ciento a su PIB y ocasionaría una baja del 3.2 por ciento en el capital social de las empresas, una reducción al salario general de 0.98 por ciento y 585 mil recortes de empleos de tiempo completo.

Los análisis de la fundación ‘Tax Foundation’ fueron en base a datos referentes al mes de noviembre del 2019, sin tomar en cuenta el impacto del Covid-19, por lo que los efectos estimados podrían ser aún mayores, comentó Hector Magaña del Centro de Investigación en Economía y Negocios.

“Los flujos de dinero que las empresas podrían destinar a la inversión en nuevos proyectos y, por tanto, al incremento en su planta laboral, en adelante serían destinados para cumplir con las obligaciones fiscales”, comentó.

Para Alejandro Saldaña Brito, economista en jefe de Ve por Más, el impacto negativo que generarían los mayores impuestos se verían en el largo plazo, pues en el corto o mediano plazo Biden estaría trasladando recursos a los hogares, lo que provocaría impulsar el consumo.

“(Pero) si al final en el balance se termina por afectar el crecimiento económico de Estados Unidos, vamos a ver seguramente una desaceleración en su industria y esto va a afectar al crecimiento de la industria mexicana y si la economía crece menos, se generan menos empleos y esto puede afectar el crecimiento de los envíos de remesas a México, aunque esto podría estar compensado si se les dan muchos apoyos a los hogares más vulnerables y a las minorías’’, indicó el especialista.