Nadie en su sano juicio podría justificar la barbarie con que se condujeron algunas asistentes a la marcha en la Ciudad de México ayer, nadie puede justificar bajo ninguna circunstancia la agresión al periodista, pero tampoco nadie puede negar que la irritación social llega a su límite y estamos al borde del colapso.
La autoridad capitalina al igual que la de México “autorizan” esas actitudes bajo la bandera de la no intervención por la fobia que aún les produce la represión histórica del 68, sobre todo porque quienes hoy nos gobiernan finalmente son producto de esas calles, de esas luchas, nadie puede exigirle a quien cerró e hizo perder millones de recursos o a sus cogobernantes que hoy actúen contra su naturaleza, contra su instinto de marchistas.
La Jefa del Gobierno Capitalino está convertida en una especie de “bombero” de la política, no tiene la capacidad o no la utiliza si es que la posee, para planear, para prevenir, para buscar evitar estos vergonzosos acontecimientos.
Ya es cotidiano leer de ella frases de urgencia como “exigiré a Procuraduría investigue” “exigiré esclarecer los hechos” y nos gustaría escuchar de ella, a la marcha convocada hoy la acompañarán (tal) número de elementos, la logística será de tal manera.
A cambio, vemos cómo nuestras autoridades parecen padres arrepentidos que cuando pretenden reprender a sus hijos el pasado, su pasado, los obliga a bajar la guardia y auto censurarse bajo el argumento “yo era peor”
Y nosotros creemos que ya basta de tanta tolerancia, permisividad, pero sobre todo basta de no prevenir estos hechos, el vandalismo de ayer ya dio la vuelta al mundo, pocos países permiten se dañen sus monumentos históricos de manera tan impune.
Señora Claudia Sheinbaum, ponga orden en su casa, no importa que usted y su Presidente así como todos sus funcionarios provengan de las mismas ideas y acciones que hoy debe reprender, entiéndalo y actúe en consecuencia, pero sobre todo piense cómo lo que ya es: La Mujer que debe ser Garante de la seguridad y certeza de la Ciudad de México, ya no es más la luchadora social que acompañó y quizá magistralmente tantas y tanta luchas sociales.
¡Basta!
Video vía Milenio: