Por: Yaressi Ortega. Directora General

No, no debería ser un tema más relevante que escribir y volver a escribir y seguir gastando tinta editorial por muchos días sobre la irrefutable brutal manifestación de “héroes” que les asignó un director de gobierno federal a los asesinos cobardes y desquiciados que cegaron la vida de un hombre que le dio lustro a nuestra entidad y al país entero, un (él sí) valiente empresario que diseñó nuevas maneras de lanzar la industria en México.

Pero tras las desafortunadas palabras de ese funcionario se desató una cacería de brujas (bien merecida) por errar en sus conceptos al hacerlos públicos, es evidente que él y el Diputado que lo siguió en su teoría de valentía piensan eso que dicen y sostienen: “que los jóvenes asesinos eran valientes”, si, lo podrán celebrar, pero su investidura debería evitar que lo hagan público, sin embargo, parafraseando a Mario Castillejos (QDEP) “lo escrito, escrito está”.

Ahí debió parar este asunto, pero no. Vendría buscar el lucimiento personal, vamos a capitalizar políticamente el desliz; el apetito de reflectores entonces invadió a muchos actores políticos, la presa estaba lista, la clase empresarial lanzaba la orden de ataque y surgió toda clase de desaprobaciones.

Sin embargo, vendría lo peor, una propuesta Ilegal y contraria a la Constitución que ¡juraron cumplir y hacer cumplir los Diputados. Vendría esa idea de tener la razón política y ajustar la realidad jurídica a esta.

Le tocó la honrosa misión de pararse frente a la máxima tribuna del estado a Luis Susarrey, aquel joven político que hasta un Oxxo te pone. “Valiente” propuso lo impensable ¡declarar non grato a un funcionario público y Diputado! A esos que escribieron y declararon de la valentía de los jóvenes asesinos, parecía una ocurrencia más, pero no señores, no, vendría lo impensable, contra toda lógica y legalidad a la violación constitucional se sumaron ¡30 de 42 diputados!

Entonces el daño a la memoria de don Eugenio pasaba a segundo término, ya no era importante cumplir sus principios de irrestricto apego a la ley, había que saciar el ansía de pegarle a un gobierno errático en muchos aspectos y tomaron como carnada para ello el tema de moda.

Nada pasará más allá de esto, la gente ya no es desconocedora y huele el truco de Acción Nacional, no importa que Mauro Guerra pague publicidad para rasgarse las vestiduras argumentando en sus redes que el Gobierno Federal celebra la muerte de don Eugenio Garza Sada.

Resulta vergonzoso seguir viendo una novela que los panistas crearon para fortalecer sus posibilidades de cara al 2021 y en el que muchos diputados declararon ser presa de su desconocimiento del tema y se retractaron como si fuera tan simple como eso.

En fin, ese es el nivel de los panistas que han provocado una especie de crisis de ideales y ahora enaltecen lo que han ensombrecido con sus acciones los últimos años: los Valores del regiomontano ejemplar como don Eugenio, la lucha intestinal por reflectores cobrará mayores disparates en los meses siguientes, esa es nuestra condena.