POR: DON MAQUI

Lo dijimos al iniciar la justa mundialista que los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León, podían hacer historia en su participación.

También dijimos que parte de su éxito estaría cifrado en que su máxima figura André Pierre Gignac, lograra un nivel óptimo pues bien el francés por lo menos en estos dos juegos salió en plan de crack, y con tres goles suyos logró colocar a su equipo en una final histórica.

Se ha dicho muchas veces ya, que ningún equipo mexicano había logrado lo que los universitarios, acceder a la final el lugar que consigan hoy simple y sencillamente será el mejor de todas las décadas que llevan de participación los mexicanos.

Pero que significaría para los Tigres en realidad se los campeones del certamen, muy fácil y muy sencillo, simplemente pasarían a ser de otro planeta en sentido figurado, serían ahora sí el nuevo grande de México, inalcanzable, es el logro para cualquier equipo de este país incluido el América, las Chivas, el Cruz Azul, Pumas ya no se diga para su acérrimo rival Rayados que quedarían muy por debajo del nivel de los felinos.

La mesa está servida para que los Tigres hoy den ese partido que le deben a su afición desde aquel día que también la historia del fútbol mexicano les permitió ser finalistas de la Copa Libertadores, y lastimosamente perdieron aún y con su máxima figura recién desempacada de Europa.

Los felinos además de los 5 millones de dólares que ganarían si son campeones, lograrían un prestigio mundial que a las marcas que los patrocinan les vendrían como anillo al dedo, diría López Obrador.

Nada es imposible en esta vida y no cuesta nada soñar, esperemos que los Tigres salgan en su mejor momento y no falle, para ver lo inaudito un campeón del mundial de clubes mexicano.

Ya contamos con ansias las horas para ver en acción al cuadro felino, vayan las mejores vibras para ustedes de parte de Don Maqui y todo el equipo de El Rincón de Maquiavelo empezando por nuestra directora Yare si Ortega.