Hace apenas unos minutos, un terremoto de 7.1° en escala Richter tomó lugar en el sureste de California, logrando que Las Vegas, San Diego y Tijuana pudieran sentir su presencia.
Fue apenas el día de ayer, 4 de julio, cuando el primer terremoto se presentó, en una magnitud de 6.4° en escala Richter, mismo que había sido declarado como uno de los terremotos más fuertes registrados en la última década.
Hasta hace apenas unos minutos los datos cambiaron, en el condado de Kern, California, se registraron más de mil sismos menores, antes de que a un nivel de 6.9° grados en escala Richter otro sismo azotara Los Angeles, mismo que originalmente se midió en un grado de 7.1
El USGS ha declarado este como el terremoto más fuerte en la historia de Estados Unidos, superando aquel ocurrido en el 98, el cual causó severos daños en San Francisco.
El Gobernador de California, Gavin Newsom, compartió un mensaje a sus ciudadanos a través de su cuenta oficial de Twitter, donde confirma que actualmente se encuentran tomando medidas de prevención y cuidados.
“En respuesta a otro gran terremoto en el sur de California esta noche, he activado el @Cal_OES el centro de operaciones del estado a su nivel más alto, y el estado está coordinando la ayuda mutua a los socorristas locales . – Gobernador @GavinNewsom”
A través de las redes sociales, las personas comienzan a crear especulaciones que en su mayoría aseguran que esto se trata de la llegada de “the big one”, terremoto estimado por un 9.1° a escalada Richter, mismo que sería responsable de activar la falla de San Andreas.
Esto a pesar de que los sismos ocurridos ayer y hoy se registraron lejos de la falla de San Andreas y el gobierno asegura que no tienen relación entre sí, sin embargo, la ciudadanía toma esto como una estrategia del gobierno para evitar la histeria entre las personas, por lo que sugieren mantenerse preparados en caso de que se aproxime una de las más catastróficas tragedias.