En la congeladora se quedaron los análisis de las demandas que ponen en riesgo las reforma que el presidente Andrés Manuel López Obrador considera prioritarias, puesto que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tendrá su última sesión el día 10 de diciembre.

Hasta esa fecha no se contempla en sesiones alguna de las 11 impugnaciones pendientes contra esas reformas, cabe destacar que algunas de ellas tienen casi dos años de haber sido presentadas ante esta instancia.

Los asuntos votados en el Pleno de la SCJN hasta el día 17 de este mes, equivalen al 72.5 por ciento de los 182 asuntos votados este año que comprenden demandas contra leyes estatales o conflictos entre órganos de gobiernos locales.

En el año solo dos casos que se discutieron llamaron la atención la invalidez de la Ley Bonilla y las acciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos contra leyes estatales, siete de los casos relevantes para la 4T son actos de inconstitucionalidad, que se resuelven de forma rápida ya que sus juicios no requieren desahogo de pruebas.

De los 182 expedientes que se votaron, el 103 es decir el 56% eran expedientes abiertos en 2019 o 2020, y aunque la pandemia interrumpió las sesiones por un mes, el periodo vacacional de julio
Se canceló para seguir resolviendo casos.

En tanto lo que seguirá en debate para el 2021, es la reducción de salarios a los órganos autónomos que ya va para su segundo año seguido que no se resuelve y dicha controversia quedará sin materia el 1 de enero ya que se impugna el presupuesto de egresos del año.