Aunque el Instituto de Control Vehicular destacó que comenzó en febrero pasado la actualización de placas con lo que busca regularizar un millón 300 mil, que las tienen desde el año 2015 o anteriores, aunque solo ha respondido el 7 por ciento de los que se encuentran en esta situación.
Cabe señalar que actualmente en Nuevo León el padrón vehicular se detalló que asciende a cerca de 2.6 millones de vehículos y las autoridades requieren que la mitad cuente con placas recientes, por lo menos del año 2016 en adelante.
“Cuando se termine este programa veremos realmente cuántos van a quedar. Aquellos que no hagan un trámite de actualización, sus placas ya no van a poder circular porque ya no tendrán valor y serán dadas de baja”, mencionó Rubén Zaragoza Buelna, quien es titular del Instituto.
También se destacó que los agentes de tránsito de los diversos municipios podrán retirar los automóviles de la circulación al no tener placas vigentes. Las sanciones se aplicarán a partir del primero de diciembre, una vez que venza el plazo para realizar el trámite.
“Los modelos 2007 y anteriores tienen una tarifa máxima especial y subsidiada de 2 mil 887 pesos. Hay otros modelos y segmentos, los vehículos 2008 a 2013, estos tienen otra tarifa máxima que son 4 mil 811 pesos”, agregó.